domingo, 24 de abril de 2011

La juventud precaria

Y yo me pregunto... ¿¿hasta cuándo??

Fuente: http://blogs.publico.es/lunamiguel/2011/04/15/la-juventud-precaria/
Autora: Luna Miguel
(Artículo del 12 de abril de 2011):

El otro día no fui a la manifestación de los estudiantes. No fui porque tenía siete euros en la cuenta. No fui porque mi precariedad me invitó a quedarme en casa todo el fin de semana hasta que, al fin, el lunes, pudiera ingresar un bendito cheque de cien euros por un trabajito que hice y que me salvará (mejor dicho: “salvará”… quisiera poner el entrecomillado más fuerte y más grande) el resto del mes. Porque juventud precaria es alquiler chungo y un sueldo que no te permite llegar a fin de mes. Que todo se me va en el alquiler. Que todo se me fue con la leche, el aceite y el jabón. Pero no será por que yo sea una Ni-Ni o una vaga, de hecho, ya lo dije, no creo en la generación Ni-Ni. ¿Son Ni-Ni esos 5000 estudiantes y jóvenes que salieron a manifestarse para denunciar las terribles condiciones en las que nos encontramos?

Dicen que madurar, crecer, hacerse una mujer o un hombre es notar el navajazo de una cuenta a cero, apretarse el cinturón y dejar de comprar libros, discos, o ir al cine o incluso las fotocopias para la Universidad (imprimiré por detrás y por delante a doble cara y con papel reciclado). Dicen que hacerse mayor es besar cada céntimo o billete antes de ser sacrificado. Rezar a los dioses del Olimpo por un trabajillo aquí y allá o por una casa sin moho en la bañera.

Este año se han dado menos becas MEC. No lo sé por ningún estudio, lo sé por mi caso propio o por el de algunos amigos, conocidos o compañeros de clase. Me gustaría haberme manifestado por ello. Me gustaría haber gritado muy fuerte por ello. Y por otras cosas. Y por muchas otras y otras más. Pero la precariedad es esa fiebre que te deja chafado en casa. Juventud triste. Qué mal.



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1 comentario:

  1. Amén desde Huelva. Desde mi zulo de 30 metros que no dan espacio ni para pensar, te deseo suerte.

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