jueves, 30 de junio de 2011

¿Puede sobrevivir la UE?

Fuente: http://www.sinpermiso.info/textos/index.php?id=4262


Para quienes entienden la Teoría Monetaria Moderna (TMM) resultó siempre obvio que el lanzamiento de la Unión Monetaria Europea cometió yerros fatales. Sabíamos que a la primera crisis financiera y económica seria, se vería amenazada su misma existencia. En cierto sentido, ha pasado desde el principio como en los EEUU de 1929, en vísperas de la Gran Depresión: un fraude crediticio excesivo, una excesiva deuda de las familias y de las empresas, y un boom económico que duró demasiado tiempo. Cualquier cosa podría haber disparado la crisis que siguió, pero fue el descubrimiento de que Grecia había estado cocinando su contabilidad lo que selló el destino de Eurolandia. Y como en los EEUU posteriores a 1929, Eurolandia pugna por comprender y por lidiar con la crisis. Ahora se desliza hacia otra gran depresión.



Muchos economistas y muchos responsables políticos –incluso algunos suficientemente ortodoxos— empiezan a reconocer que el obstáculo atravesado en el camino es la incapacidad para armar una respuesta en términos de política fiscal efectiva. Esa incapacidad nace de la ausencia de una autoridad fiscal a escala europea. De aquí las semimedidas tomadas por el BCE y otras autoridades para poner parches al problema de la deuda.

Ello es que hay un conflicto entre las distintas autoridades respecto de la solución al problema, como no podía ser de otra manera, dada la ausencia de una autoridad fiscal. Muchos desean imponer una austeridad equivalente a las sangrías "terapéuticas" medievales. Sostienen que el problema real es la falta de autodisciplina en los países periféricos. Y no puede dejar de observarse que esa idea es ampliamente compartida por las elites de esos mismos países. Esas elites se sentirían felices arrojando a sus propios países al abismo de la depresión, a fin de desbaratar toda resistencia a los recortes salariales y de llevarse por delante todos los programas sociales a favor de la población trabajadora. Esa es siempre la solución preferida por las elites ignaras. Con este método se pretende rebajar los costos salariales en las naciones periféricas y hacer más competitiva la producción.



Esa es también, huelga decirlo, la posición de los miembros más poderosos de la UE. La prudente Alemania ha mantenido a raya los salarios durante la pasada década, disparando la productividad. Consiguió así convertirse en el país con producción de menos coste en Europa, y pasito a pasito, podría llegar a poder competir hasta con Asia. No, desde luego, en la producción fundadada en trabajo intensivo barato, sino en la producción que de verdad cuenta, en el sector exportador de alto valor añadido.

Y esa es también la perspectiva más común también entre las clases trabajadoras en los países centrales, que comparten el prejuicio de unas poblaciones periféricas tan holgazanas como exageradamente remuneradas. Más asombroso aún que la falsedad de esa actitud, es el hecho de que si la sangría fiscal y el recorte de los salarios se pusieran efectivamente por obra en los países periféricos, no tardarían las fábricas en comenzar a salir de Alemania buscando trabajadores menos costosos. En otras palabras, el éxito de la periferia sería a costa de los trabajadores alemanes, que tendrían que aceptar salarios más reducidos para poder competir. Lo que de todos modos ocurrirá, espoleado por la pérdida de puestos de trabajo, si Alemania no puede encontrar ventas para sus productos fuera de la UE, en donde la demanda caerá indefectiblemente a medida que las naciones periféricas se hundan más en la depresión. El resultado será una bonita carrera hacia el abismo, de la que sólo puede beneficiarse la elite europea. Muy bonito.



Para decirlo todo, yo no creo que la UE pueda llegar a chupar suficiente sangre de los griegos (y españoles e italianos e irlandeses y portugueses) para que eso pueda funcionar. Harto más razonable sería ahora un aumento salarial en Alemania para conseguir competitividad dentro de la UE por la vía de elevar el nivel general. Pero tampoco eso parece nada probable, habida cuenta de que Alemania mira hacia más allá de las fronteras europeas, sobre todo en dirección al Este. Por consiguiente, seguirá empeñada en recortar sus propios costes laborales, y las naciones periféricas nunca conseguirán atrapar a Alemania en el común despeñadero.

Eso deja sólo dos alternativas. La primera es una reestructuración continua de la deuda, con compras del BCE por la puerta trasera (permitiendo a los bancos centrales comprar la deuda), y con garantías y préstamos del propio BCE. Todo en la esperanza de que las instituciones financieras tenedoras de toda la deuda pública periférica puedan, o bien sacarla de su contabilidad, o bien servirse del método norteamericano de ir proponiendo el ajuste a la baja de sus balances alargando indefinidamente el proceso de ajuste para no reconocer su insolvencia. El problema es que casi todos los datos económicos de las últimas semanas son malos –en prácticamente todo el mundo—, lo que hace más probable que se produzca algún tropezón en algún sitio y que se propague a través de los mercados financieros tan rápidamente como lo hizo en la Crisis Financiera Global de 2007.

Muchos bancos europeos quedarán con las nalgas al aires como insolventes sin remedio, y la deuda pública de los PIIGs será un problema añadido. Además, el BCE está legítimamente preocupado por los "precedentes" y los "efectos de incentivos". No se trata de las normas reguladoras de lo que el BCE puede o no hacer: tiene tanta licencia como la Reserva Federal para intervenir en una crisis y comprar o prestar a cambio de prácticamente cualquier tipo de activo. Se trata de lo que el BCE entiende que es su independencia. Los mercados verían un rescate de estilo norteamericano del sistema financiero europeo (con garantía de la deuda pública de la distintas naciones, por añadidura) como una pérdida de independencia. Lo cierto es que el BCE ya la ha entregado, pero se agarra a la esperanza de poder recuperar de algún modo la virginidad perdida.

Eso deja sólo una posibilidad: crear la necesaria autoridad fiscal. Eso permitiría al BCE limitarse a la política monetaria, cediendo al Tesoro europeo las riendas para lidiar con la crisis. Yo he venido sosteniendo desde 1996 que este es el único camino para hacer viable el proyecto de la UE. La teoría económica subyacente a ese punto de vista es sencilla, y es la que vale por doquiera en todos los países desarrollados. En efecto: los EEUU son en realidad una Unión Monetaria Norteamericana (UMN), pero una unión monetaria bien constituida, que dispone de un Banco Central y de un Tesoro. Sin embargo, por razones políticas, eso no va a ocurrir en la UME. Estamos ahora más lejos de ello aún que en 1996, porque la crisis ha hecho crecer la hostilidad entre sus miembros. Nadie quiere ceder poderes al centro.

Así pues, nada de todo eso va a suceder. ¿Qué queda? Salir de la unión.




Randall Wray es uno de los analistas económicos más respetados de Estados Unidos. Colabora con el proyecto newdeal 2.0 y escribe regularmente en New Economic Perspectives. Profesor de economía en la University of Missouri-Kansas City e investigador en el "Center for Full Employment and Price Stability". Ha sido presidente de la Association for Institutionalist Thought (AFIT) y ha formado parte del comité de dirección de la Association for Evolutionary Economics (AFEE). Randall Wray ha trabajado durante mucho tiempo en el análisis de problemas de política monetaria, macroeconomía y políticas de pleno empleo. Es autor de Understanding Modern Money: The Key to Full Employment and Price Stability (Elgar, 1998) y Money and Credit in Capitalist Economies (Elgar 1990).


¿Qué te ha parecido este artículo? ¡Deja tus comentarios!

Explicación de la crisis en dibujos

Un dibujante explica cómo hemos llegado a la crisis actual. 
Fuente: http://thespanishrevolution.blogspot.com/.
Para una explicación más detallada ver también "Españistán: de la burbuja inmobiliaria a la crisis".




¿Qué te ha parecido este artículo? ¡Deja tus comentarios!



       

miércoles, 29 de junio de 2011

¿Mileurista? ¡Ya nos gustaría!

http://blogs.que.es/14667/2011/6/27/salarios-submileuristas-asi-son-verdad-esos-sueldos

Salarios Submileuristas; así son de verdad esos sueldos españoles tan poco competitivos que la patronal quiere rebajar.

El Instituto Nacional de Estadística (INE) ha publicado recientemente la Encuesta Anual de Estructura Salarial difundida.

El sueldo de los gerentes de empresas con menos de 10 asalariados tuvo una remuneración superior en un 68,8% a la media y las ocupaciones asociadas a títulos universitarios,a técnicos y profesionales de apoyo o a servicios de protección y seguridad también situaron sus salarios "muy por encima de la media".

Según el estudio, la ganancia media anual por trabajador en España fue de 22.511 euros y mientras los hombres reciben un salario medio de 25.001 euros, las mujeres cobran 19.502 euros. La nómina más habitual de los trabajadores españoles sigue siendo de mil euros. Según la última encuesta anual de estructura salarial, correspondiente a 2009, el sueldo más frecuente se mantiene en el entorno de los 15.500 euros. Apenas 3.300 euros inferior al salario mediano (aquel que sólo contabiliza a los sueldos superiores e inferiores) cuyo valor es de 18.817 euros.

En cambio, si se toman en cuenta las nóminas de todos los trabajadores españoles, la ganancia media en 2009 (últimos datos conocidos) se situó en 22.511 euros, un 2,9% más que el año anterior. Muy lejos, sin embargo, de los sueldos medios que se cobran en los países con más peso de la eurozona. Según los últimos datos del barómetro Eurostat, correspondientes a 2007, los trabajadores cobran de media en Francia 32.413 euros y 40.200 euros en Alemania.

Salarios Submileuristas.
Así son de verdad esos sueldos españoles tan poco competitivos que la patronal quiere rebajar. Ese es el repetitivo discurso de la CEOE desde hace muchos años y de nuevo lo sacan de la chistera, subidos al carro de los recortes y las reformas dictadas por los mercados.

Puestos a exigir reformas y recortes podrían empezar por igualar los salarios. Es indecente que siempre nos quieran comparar con el resto de países punteros de Europa sin hablar de agunas diferencias importantes.

Informe sobre salarios en España (Documento en PDF)




¿Qué te ha parecido este artículo? ¡Deja tus comentarios!

lunes, 27 de junio de 2011

La patronal y el sector público

http://www.rebelion.org/noticia.php?id=130764



El presidente de la Confederación de Empresarios de Andalucía, prácticamente a coro con otros dirigentes patronales, ha afirmando que "es evidente que hay un sobredimensionamiento de las administraciones públicas, una superposición de las administraciones públicas y un excedente de funcionarios". Una aseveración sin mucho fundamento y que me parece que solo responde a sus preferencias ideológicas y al intento de contribuir con menos impuestos al interés colectivo. Es evidente que no hay una medida objetiva que indique cuál es el número ideal de empleados públicos, no solo de funcionarios, que debe haber en una sociedad. Pero lo que sí sabemos a ciencia cierta es que las sociedades más competitivas y favorables para el bienestar humano son generalmente las que tienen un sector público mayor y más eficiente. Por eso la única forma de poder hablar con propiedad de si su dimensión es más o menos la adecuada es la de compararnos con esas naciones que deberían servirnos de referencia.

Para ello daré algunos datos relativos al periodo 2000-2008 (que es mucho más representativo que el de los dos últimos años de excepcionales condiciones económicas) recogidos del informe "El empleo público en España no es excesivo. Los errores del informe sobre el coste de la administración de la EAE Business School", realizado por Vicenç Navarro, catedrático de Políticas Públicas de la Universidad Pompeu Fabra y de la John Hopkins University de Estados Unidos, y Marta Tur, coordinadora del Observatorio Social de España.

España es uno de los países integrantes de la UE-15 con un sector público de menor tamaño. Nuestro porcentaje de población empleada en él sobre el total de población activa era del 12,75% en 2008, mientras que el de Dinamarca llega al 31,27%, el de Finlandia al 24,64% o el de Suecia al 26,2% en 2007. Y, a diferencia de lo que también se afirma, el crecimiento del empleo ha sido más rápido en el sector privado que en el público.

Es verdad que de 2000 a 2008 el gasto público realizado por España ha aumentado significativamente, con una media del 5% anual que es superior a la de la UE-15 que fue del 3,4%. Pero hay que tener en cuenta que el déficit que presenta España en cuanto a gasto público respecto a la UE-15 es muy grande. Así, a pesar de este crecimiento, todavía tenemos un gasto público por habitante de 2.600 euros (estandarizados) menos que el promedio de la UE-15.

Además, España era en 2008 el país de la UE-15 que menos gastaba en salarios a los trabajadores públicos y el quinto que menos gastaba en compensación salarial a sus empleados públicos por habitante.

Sobre Andalucía lo cierto es que está muy ligeramente por encima de la media española en estos parámetros pero, por tanto, muy alejada también de los niveles medios y superiores de nuestro entorno europeo más ejemplar.

Y tampoco es cierto que en Andalucía la tendencia haya sido al crecimiento del número de empleados públicos si la medición se hace tomando el porcentaje de asalariados en el sector público sobre el total de asalariados, puesto que aquí se registró una disminución de 1,30 puntos de 2005 a 2008 y en el conjunto español de 0,80 puntos.

Por tanto, si nos comparamos con los países europeos más ricos y competitivos lo cierto es que no tenemos un sector público demasiado grande, como dice la patronal, sino demasiado pequeño y que debemos aumentar nuestro gasto público en lugar de reducirlo.

Naturalmente, lo que acabo de señalar no quiere decir que el sector público funcione todo lo bien que debiera (lo que es prácticamente imposible gastando insuficientemente en él) o que todos los empleados públicos estén bien utilizados. Pero eso es una cosa y otra que esté sobredimensionado, como afirma el señor Herrero.

Por otro lado, no se puede olvidar que lo que está pasando a partir de 2009 es extraordinario y que no es precisamente la iniciativa pública a quien haya que hacer responsable de ello sino más bien a la privada, y particularmente a la financiera. Lo que quizá habría que preguntarse es cómo estaríamos ahora y dónde habrían ido muchas más empresas de las desaparecidas por culpa de la banca si hubiésemos tenido ya el sector público jibarizado que propone las patronales.

En suma, o el presidente de la patronal andaluza está muy mal informado o lo que desea es que Andalucía se parezca más a los países atrasados que a los más avanzados que nos rodean.


Juan Torres López es catedrático de Economía Aplicada de la Universidad de Sevilla.

¿Qué te ha parecido este artículo? ¡Deja tus comentarios!

domingo, 26 de junio de 2011

¿Miedo? ¿Pánico? ¿A quién teme el lobo feroz?

http://blogs.publico.es/trabajarcansa/2011/06/25/alarma-panico-vertigo-tragedia/

“Los mercados están muy nerviosos, y necesitan para calmarse una solución formal, que adoptemos las medidas que sean necesarias.” -Joaquín Almunia, vicepresidente de la Comisión Europea-



Otra semanita de sobresaltos, y ya hemos perdido la cuenta de las que llevamos. Recorto la prensa de ayer: “Alarma en los mercados”, “Pánico en los mercados”, “Vértigo en los mercados”, “Tragedia en los mercados”. Deberían renovar las expresiones, que están ya muy vistas. Para el próximo susto sugiero subir un escalón: “Terror en los mercados”, “Pesadilla en los mercados”, “Sálvese quien pueda en los mercados”, o incluso “Los mercados y los niños primero”.

Ahora bien, no todo el mundo se ha enterado de que los mercados sufrieron esta semana pánico, vértigo, alarma y tragedia. Reviso la prensa europea, tanto diarios generalistas como económicos, y ni en Francia, ni en Italia ni en Alemania, ni siquiera en Portugal, encuentro expresiones tan dramáticas. Todos informan del comportamiento de las bolsas, las dudas sobre Grecia, las primas de riesgo, pero ninguno habla de pánico, vértigo, alarma ni tragedia.

¿Entonces? ¿Quiénes son los asustados? ¿Los mercados o nosotros? ¿Quién asusta a quién? ¿Por qué nos dicen que los mercados necesitan confianza, si en realidad somos nosotros los que estamos que no nos llega la camisa al cuerpo cada vez que nos dan otro susto y oímos repetir las consignas: “España no es Grecia”, “España no necesitará ser rescatada”?

Para acabar de tranquilizarnos, ayer se aprobó la “Estrategia Española de Seguridad”. Junto al terrorismo, las guerras o el crimen organizado sitúa como amenaza para España la “inseguridad económica y financiera”. Y entre los riesgos a tener en cuenta, el primero que aparece es “el propio funcionamiento del sistema”. Ah, qué bien.

Decía esta semana el Gobernador del Banco de España que nuestro país sigue sometido a una “vigilancia muy estricta por parte de los mercados”. Esos mismos mercados que son considerados una amenaza para la seguridad nacional. Vamos, que nos tienen rodeados, y no hay pasadizo secreto para escapar. ¿Cabe combatirlos, podemos esperar ayuda de nuestros vecinos para resistir el asedio, o sólo queda rendirse y rezar para que no hagan mucho destrozo?





http://blogs.publico.es/trabajarcansa/2011/06/12/%C2%BFa-que-tienen-miedo-los-empresarios/


“Si los empresarios tienen pánico a contratar, habrá que quitárselo, habrá que tranquilizarles, darles confianza.” -Esteban González Pons, secretario de Comunicación del PP-

Por más que busco en los manuales clínicos de fobias, no encuentro ese miedo del que lleva tiempo hablando la patronal: el miedo del empresario a contratar. “Pánico”, en expresión del presidente de la CEOE. “Horror”, según el gobernador del Banco de España.

El “pánico a contratar” no es como el temor a volar, a las arañas o a la oscuridad. En la definición patronal se parece más al de esos propietarios que no alquilan sus pisos por miedo a que los inquilinos se los destrocen, les dejen de pagar y no haya quien los eche. Así, los empresarios no contratarían porque les da sudor frío pensar que luego, si las cosas van mal, no podrán despedirlos, ni modificarles el sueldo o la jornada.

Sé que muchos empresarios las están pasando canutas. Pero por lo que conozco, en sus pesadillas no aparecen empleados atornillados a la silla e inflexibles como piedras, sino créditos denegados, pagos aplazados, acreedores haciendo cola, y consumidores con los bolsillos hacia fuera.

La contratofobia, como la mayor parte de fobias, tiene una base irracional, y se basa en falsas creencias: en primer lugar, el mito de que el mercado español es muy rígido, que despedir es caro y difícil.

Nadie lo diría, en un país donde se despide de cien en cien (incluso con beneficios), donde dos millones y medio se han ido a la calle desde el comienzo de la crisis, algunos sin cobrar salarios atrasados. Un país donde tras sucesivas reformas hay un amplio catálogo de modalidades de contrato, algunos baratísimos y de despido fácil, y subvencionados. Por no hablar de la “flexibilidad”, que existe de hecho antes que de derecho, como bien saben los muchos trabajadores que han visto modificadas sus condiciones por la vía del “son lentejas”.

La insistencia en el miedo a contratar busca reforzar otro mito, igualmente falso: la creencia de que las reformas laborales crean empleo. Mientras no se recupere el consumo, siga cerrado el grifo del crédito, y continúen las asfixiantes políticas de ajuste, ya pueden reformar lo que quieran, que el miedo no se irá ni con ansiolíticos.



¿Qué te ha parecido este artículo? ¡Deja tus comentarios!


  

sábado, 25 de junio de 2011

Ataque de Anonymous a Telefónica este domingo 26 de junio

Publicamos esta información que nos ha llegado por facebook sólo para informar a los lectores del blog de que el próximo 26 de junio Anonymous lanzará un ataque contra Telefónica. Esta acción está relacionada con el despido colectivo de 6500 trabajadores que piensa efectuar la compañía, a pesar de sus fuertes beneficios.

Quizás ese día pensaran entrar en la página de Telefónica para alguna consulta, y deben saber que probablemente ese día la página estará colapsada por un exceso de visitas.

Si alguien quiere informarse mejor sobre lo que es Anonymous, puede consultar su web española: http://spainanonymousblog.blogspot.com/.

Saludos ;-)
Violeta







¿Qué opinas del ataque a Telefónica? ¡Deja tus comentarios!


  

Carta al presidente (NO al Pacto del Euro)

Fuente: http://www.facebook.com/home.php#!/event.php?eid=193124270738804  

Hemos decidido escribir una carta al presidente del gobierno de España para que se oponga al "Pacto del Euro", ya que no protege a los ciudadanos sino que empeora nuestra calidad de vida.

A continuación dejo un modelo de carta a seguir, si lo queréis podéis escribir vuestra carta para que se más personal, que no se olvide el DNI y dirección. ( si es escrita de puño y letra mejor, también recomiendo utilizar papel reciclado, Gracias)

Creado por: ÚNETE, ACTUA Y NO ESTÉS SOLO INDIGNAD@. Nuestro Facebook: http://www.facebook.com/pages/%C3%9ANETE-ACTUA-Y-NO-EST%C3%89S-SOLO-INDIGNAD/129389033808353 

Te esperamos, gracias.

Si navegas con firefox puede dar problemas de envío. Si es así, cambia de navegador.





 

(Nombre y apellidos)
(dirección completa)


DNI:


España, a 26 de junio de 2011




Estimado presidente:


Debido a la situación actual que atraviesa nuestro país, es de mi agrado ponerme en contacto con usted para transmitirle mis inquietudes. Quiero hacerle saber que estoy en desacuerdo total sobre el “Pacto del Euro”, ya que olvida lo más fundamental e importante: la ciudadanía.


Usted fue elegido por los españoles, para representarnos. Si nos quiere representar (ud), la mejor forma es no firmar ese pacto que empeora la calidad de vida de los españoles y europeos. En nuestro país la situación está al limite, no podemos abarcar más reducciones en el gasto de la educación, ni subidas de impuestos, ni reducciones de ayudas sociales, entre otras, que sugiere el “Pacto del Euro”.


Le agradezco de antemano su atención prestada. Recuerde que la mejor respuesta a esta carta, es la oposición al pacto.






Un cordial saludo,




(Firma)






(Dirección de envio:

Excmo. Sr. D. José Luis Rodríguez Zapatero
Presidente del Gobierno
Complejo de la Moncloa,
Avda. Puerta de Hierro, s/n.
28071 Madrid, España )






(Recomendación: si se escribe a mano mejor. De lo contrario si se usa el PC usar el tipo de letra times new roman, con un tamaño de letra de 12, que quede bien centrada la carta, si se usa papel reciclado mejor, IMPORTANTE: lo que esta entre paréntesis se borra o sustituye por lo que pide)

(Para hacerlo via online: https://portal-scc.presidencia.gob.es/ciudadan@s/contacto.jsp no olvide que donde pone firma, se sustituye por el nombre. La fecha esta adelantada unos dias, pon la actual) Gracias



     

viernes, 24 de junio de 2011

Los sindicatos minoritarios rechazan el ERE de Telefónica


El gobierno, quizás presionado por el movimiento 15M, ha exigido a Telefónica que pague el desempleo de los trabajadores que despida para que no tenga que hacerse cargo el Estado. Telefónica aceptó, reduciendo entonces el alcance del ERE de 8500 a 6500 trabajadores. Pero también ha reducido la proporción del subsidio de desempleo que les pagará. Los sindicatos minoritarios (LAB, CGT, co.bas...) se oponen a este ERE, en una empresa que está teniendo fuertes beneficios. Fuente: http://www.deia.com/2011/06/08/economia/los-sindicatos-rechazan-en-bilbao-el-ere-de-telefonica-



Varias decenas de trabajadores se han concentrado al mediodía de hoy ante la sede central de Telefónica en Bilbao, convocados por los sindicatos ELA, LAB y ESK, para mostrar su rechazo a los planes de la compañía de reducir la plantilla en cerca de un 20% a través de un Expediente de Regulación de Empleo.

Según los últimos datos dados a conocer por Telefónica a principios de este mes, el ERE incluiría a un total de 6.500 trabajadores mayores de 53 años, que recibirían una indemnización equivalente al 66 % del salario. Los afectados por la medida en el País Vasco, según fuentes sindicales, serían alrededor de 800 empleados.

Joseba Lekunberri, delegado de LAB, ha expresado, en declaraciones a Efe, su rechazo a la medida planteada por la compañía, que a su juicio va a suponer la desaparición de empleos cubiertos por personal fijo "y con derechos", en favor de compañías subcontratadas con empleados en condiciones precarias.

Ha apuntado que, aunque la plantilla propia de la compañía se ha reducido de forma considerable en los últimos años (de 70.000 a unas 20.000 personas), hay más de 100.000 personas trabajando para ella en toda España.

Lekumberri, en referencia a CC.OO. y UGT, ha criticado la actitud de las organizaciones sindicales dispuestas negociar el ERE. "Un sindicato de clase que se considere como tal no puede hacerlo", ha enfatizado.

Ante las diferentes propuestas apuntadas por Telefónica en las últimas semanas, el Ministerio de Trabajo ha solicitado a la compañía que aporte nueva documentación con las condiciones definitivas.

Telefónica ha anunciado que asumirá el coste total del Expediente de Reducción de Empleo de los trabajadores afectados, incluyendo el paro y el pago a la Seguridad Social de sus cotizaciones.



Ver también: Qué es un Expediente de Regulación de Empleo (ERE)





¿Qué te ha parecido este artículo? ¡Deja tus comentarios!


   

jueves, 23 de junio de 2011

Y así rectifican en Telemadrid



Esto es periodismo de alto nivel y lo demás son tonterías...

¿Qué te ha parecido? ¡Deja tus comentarios!

Qué es un Expediente de Regulación de Empleo (ERE)

Con la excusa de la crisis o afectadas por la caída del consumo, cada vez más empresas recurren a realizar "EREs" para recortar gastos de personal, substituyendo a los trabajadores más antiguos por becarios o subcontratados... Pero ¿qué son exactamente los expedientes de regulación de empleo? ¿Qué derechos tiene el trabajador? ¿Es posible resistir a los EREs?
Hemos recopilado toda la información presente en diversos artículos de tipo jurídico o empresarial para responder a estas preguntas. Esperamos que te sea útil ;-)

Fuentes utilizadas para realizar esta entrada:
www.laboris.net/static/em_diccionario_ere.aspx, www.laboris.net/static/ca_derechos_regulacion.aspx, http://tusnominas.com/que-es-un-ere/, http://archivo.expansionyempleo.com/2008/12/12/mercado_laboral/1191677.html, www.blogger.com/stats2.g?blogID=7906156875854338545, www.weblaboral.net/ct/ct00172.htm, http://www.consumer.es/web/es/economia_domestica/trabajo/2010/02/26/191389.php.




¿Qué es el Expediente de Regulación de Empleo?
Es el procedimiento para solicitar a la Autoridad Laboral la suspensión o extinción de las relaciones de trabajo o una reducción de la jornada.
Pueden solicitarlo tanto las empresas como los propios trabajadores, a través de sus representantes legales, cuando consideren que así van a evitarse un perjuicio mayor. Pero sólo cuando se dan determinadas circunstancias previstas por la ley:
·         Despido colectivo o suspensión de la relación laboral por causas económicas, técnicas, organizativas o de la producción.
·         Suspensión o extinción de la relación laboral por fuerza mayor.
·         Extinción de la relación laboral por extinción de la personalidad jurídica del contratante.
Es despido colectivo el que afecta en un período de noventa días al siguiente número de trabajadores:
·         10 trabajadores en empresas de menos de 100 trabajadores.
·         El 10% cuando la empresa tenga entre 100 y 300 contratados.
·         30 trabajadores en aquellas de más de 300 trabajadores.
·         Toda la plantilla de la empresa siempre que sean más de 5 trabajadores, cuando la actividad empresarial cesa totalmente por las causas señaladas anteriormente.

(Si el empresario realiza despidos improcedentes en grupos sin llegar a los números que exige el ERE, se arriesga a que se pueda entender que está actuando en fraude de ley, y pueden determinarse por un juzgado, ante la denuncia por un trabajador, la nulidad de las extinciones realizadas por cuanto debió iniciar un ERE ante la autoridad laboral competente.)


Aspectos formales
El  ERE debe acompañarse de una memoria de las causas que lo justifican, un informe técnico en el caso de que se aleguen razones de carácter técnico, organizativo o productivo; y la documentación económica, cuando los motivos para llevar a cabo un ERE sean de índole financiero. Las empresas de 50 o más trabajadores deben aportar además un plan de acompañamiento social que enuncie o proponga medidas para reducir los efectos del despido colectivo y atenuar sus consecuencias. Dependiendo de los casos y de las distintas situaciones, estos planes incluirán medidas indemnizatorias, planes de prejubilación, fórmulas de recolocación , ayudas formativas y para la búsqueda de un nuevo empleo. También es un factor importante la documentación que estime el periodo necesario para proceder a la extinción de los contratos.
Si la medida afecta a menos de 200 trabajadores, la Autoridad Laboral puede ser la de la provincia donde está la empresa. Si afecta a más de 200 personas o a centros ubicados en diversas provincias, el caso podría pasar al Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales.

Si el expediente se solicita por causas de fuerza mayor, basta con informar a los representantes legales de los trabajadores y esperar la resolución de la Autoridad Laboral. En el resto de casos, se abre un período de consultas y de negociación entre empresa y trabajadores. Si no se llega a un acuerdo, la Autoridad Laboral decide si se acepta o no la regulación de empleo.



Pasos que debe seguir el empresario
En primer lugar, el empresario ha de pedir autorización a las autoridades competentes. Para ello presentará la correspondiente solicitud. A continuación iniciará el correspondiente periodo de consultas y negociaciones con la representación de los trabajadores, en el que se discutirán las causas que motiva el expediente y las posibilidades de evitar o reducir los efectos. Este período puede extenderse entre 15 y 30 días, dependiendo del número de empleados.

El acuerdo o el desacuerdo será el que ponga fin a este periodo de consultas inicial, tras lo cual el propio empresario se lo comunicará a la autoridad laboral que tramite el expediente. Cuando se consigue un acuerdo, el alcanzado sobre las medidas a tomar será vinculante para ambas partes.

Si por el contrario existe desacuerdo, la autoridad competente será quien resuelva sobre el fondo de la cuestión, dictando una resolución estimando o desestimando, en todo o en parte, la decisión empresarial.
Dicha resolución podrá ser recurrida por cualquiera de las partes.



Plazo desde la solicitud del ERE
El periodo de consultas en el despido colectivo tiene señalado un plazo de 30 días naturales (en empresas con más de 50 trabajadores) o de 15 días naturales (si el número de empleados es inferior), salvo que se alcance un acuerdo con anterioridad. En la práctica, este plazo se extiende algo más, dependiendo de la situación de la negociación laboral, de su complejidad y, a veces, de la propia estructura del caso.

Posteriormente, es preciso contar con el plazo máximo previsto para emitir la resolución administrativa -15 días naturales-, por lo que a partir de dicha resolución pueden materializarse las extinciones de los contratos a través del uso de la autorización administrativa. En conclusión, puede estimarse que el tiempo que discurre hasta que se produce el despido ronda los dos meses.


Indemnizaciones
Cuando la empresa propone un ERE cada trabajador tiene derecho a recibir una indemnización de 20 días por año trabajado, con un máximo de 12 mensualidades. Esta indemnización tiene carácter de mínimo y podrá ser mejorada por acuerdo entre las partes durante el periodo de consultas del ERE.
Sin embargo, muchos empresarios optan por encontrar una salida más armoniosa y en favor de sus empleados. Se trata de alcanzar un acuerdo entre ambas partes. De esta forma ambas partes salen beneficiadas: el dueño evita los trámites que acarrea un ERE y que en su caso no fuera aprobado por la autoridad laboral porque las causas no estén muy claras o no pueda acreditarlas, y los trabajadores consiguen aumentar su retribución.

Desde el Estudio Jurídico Vizcaíno Casas, se afirma que el empresario puede incluso acordar con ellos el abono de una indemnización por despido improcedente (45 días por año de trabajo), reconociendo la improcedencia de la extinción pero sin tener que verse inmerso en un ERE. En cualquier caso la indemnización está prevista en el artículo
51.8 del Estatuto de los Trabajadores y se justifica como una medida para mitigar las consecuencias sufridas por los trabajadores por la pérdida involuntaria de su empleo.

Está exenta de retención y tributación en el IRPF la indemnización legal, es decir, veinte días de salario por año de servicio, con el tope máximo de doce mensualidades. La parte de la indemnización que exceda de la cuantía indicada estará sujeta a tributación. No obstante, dicho exceso podrá beneficiarse de una reducción como renta irregular, al entenderse que las indemnizaciones derivadas de un ERE se han generado en el período de prestación de servicios en la compañía. Si dicho periodo es superior a dos años, será aplicable la reducción del 40% en la cuantía sobre la que se practica la retención.



Diferencias entre ERE temporal y despido colectivo
Existen dos diferencias fundamentales entre estas dos modalidades: la duración del periodo de consultas en el Expediente de suspensión temporal se reduce a 15 días y los empleados afectados por este tipo de ERE no tienen derecho a una indemnización, sólo a la prestación de desempleo, ya que este procedimiento es una suspensión temporal del contrato de trabajo. Sin embargo, los trabajadores sí pueden pactar una serie de complementos con la empresa. La edad de los empleados o el número de los afectados no son factores diferenciadores.


ERE en caso de suspensión de pagos
En el caso de declaración de concurso de acreedores corresponde a la administración concursal adoptar las medidas necesarias para la continuación de la actividad empresarial. Por eso, en principio, la declaración del concurso de acreedores no afecta a la vigencia de los contratos de trabajo. Los derechos de indemnización del empleado perjudicado por un Expediente de Regulación de Empleo Concursal (EREC) no son distintos de los del afectado por un ERE ordinario: veinte días de salario por año trabajado con el máximo de doce mensualidades. Además, en el EREC es posible que se convengan unas indemnizaciones superiores a las legales con la administración concursal.


ERE en una empresa con beneficios
Una empresa que no esté en situación de pérdidas puede formular un ERE cuando pueda alegar que concurren causas técnicas, organizativas o de producción, que justifiquen la necesidad de adoptar medidas para garantizar la viabilidad de la empresa a través de una mejor organización de los recursos o para superar una situación económica negativa. Obviamente, estas causas deben acreditarse suficientemente para que la autoridad laboral autorice el expediente.

Por tanto, una organización que tenga beneficios sí tiene la posibilidad de presentar un ERE, puesto que existen otras causas que justifican este procedimiento. Muchas veces no son sólo las situaciones extremas de pérdidas, sino de costes, de duplicidades, o de reducción de los volúmenes de ventas lo que impulsa a la empresa a presentar un ERE. Desde el punto de vista del trabajador y de sus representantes legales, una situación de beneficios empresariales hace que se puedan alcanzar indemnizaciones superiores a los mínimos legales en el periodo de consultas del ERE.


Baja por maternidad o paternidad, enfermedad o cuidado de menores
En el caso de que toda la plantilla esté afectada por un ERE, éste también incluirá a los trabajadores que disfrutan de baja por maternidad (también por paternidad), por enfermedad o de una reducción de jornada por cuidado de hijos menores. Sin embargo, estos despidos deberán justificarse muy específicamente en una reestructuración parcial. En cualquier caso, esta situación no perjudicará el cálculo de la indemnización, que se realizará atendiendo al tiempo total de servicios, sin excluir el periodo de baja.


¿En qué circunstancias es ilegal un ERE?
Este procedimiento está regulado en el artículo 51 del Estatuto de los Trabajadores, por tanto, será ilegal cuando no cumpla los requisitos establecidos en esta legislación: si no se ajusta a las causas económicas, técnicas, organizativas o de producción que los motivan; si el periodo de consultas termina sin acuerdo entre la empresa y los representantes de los trabajadores; o si el empresario formula defectuosamente el ERE.

En estos supuestos la autoridad laboral puede desestimar el procedimiento.


Negociación para evitar los despidos colectivos

Cada vez más empresas acuerdan con los responsables sindicales una "flexibilización" para evitar un despido colectivo. Así, más de la mitad de los EREs aprobados el año pasado no eran de despido colectivo sino de suspensión temporal u otras medidas temporales de flexibilización. Algunas de ellas son los días libres o la reducción de jornada.

En algunos casos, la "flexibilización" permite a la empresa seguir a flote. Sin embargo, muchas empresas con beneficios utilizan la amenaza del ERE para conseguir reducciones salariales o despiden mediante el ERE a muchos trabajadores fijos para substituirlos por otros precarios. Ejemplos de esto son el ERE de Bimbo o el ERE pactado por Telefónica con los sindicatos mayoritarios, y rechazado por los sindicatos alternativos.



Impugnación administrativa o laboral

Cuando los trabajadores no están de acuerdo con las condiciones del ERE pueden impugnarlo por la vía administrativa o laboral. Esta última se resuelve en unos meses, aunque no siempre es posible demostrar que el despido es improcedente o nulo.

La diferencia entre ambas vías está en que se discuta el ERE en sí mismo o el caso de unos trabajadores concretos:
  • Impugnación administrativa, en contra del expediente. Se cuestiona la pertinencia de ese recurso por considerar que hay otras alternativas menos perniciosas para resolver la situación. El principal inconveniente de esta vía es su tardanza. Impugnar un Expediente de Regulación de Empleo puede tardar entre tres y cuatro años hasta que se dicta una sentencia en firme y, mientras tanto, quienes están afectados por el ERE se mantendrán así durante todo el proceso de impugnación.
  • Impugnación laboral, cuando se considera que el despido es improcedente o nulo. Esta vía es más ágil, ya que se resuelve en cuestión de meses. Sin embargo, no siempre hay un despido improcedente o una actuación de mala fe por parte de la empresa que justifique seguir este camino. Cuando hay motivo para ello, no obstante, no siempre es posible demostrarlo. La mayoría de los ERE cuentan con el acuerdo de los trabajadores y sólo se revocan cuando hay un abuso manifiesto por parte de la empresa.

Cuando se redacta un ERE, se establecen en el documento unas preferencias y condiciones que se deben cumplir. Si la empresa no actúa conforme a lo pactado, o hay una sospecha de discriminación de algún tipo hacia un sector de la plantilla, el trabajador puede presentarse ante el juzgado de lo social y abrir una causa. Esto ocurre cuando todas las personas afectadas por el ERE son mujeres o trabajadores mayores. Si se demuestra que hubo una vulneración de los derechos fundamentales, o discriminación de algún tipo, la empresa tendrá que readmitir al trabajador y pagarle todos los salarios pendientes desde su despido. El empleado, por su parte, puede pedir una indemnización, aunque el monto no está tasado de antemano, de modo que el juez tiene libertad para decidir si procede o no, y cuál será la cuantía.

Periodo de consultas y acuerdos


Cuando la empresa solicita un ERE a la Administración y lo plantea a sus empleados, se abre un periodo de consultas que es obligatorio y que se celebra entre los empresarios, los trabajadores y los representantes legales de ambos.
  • Es un plazo para brindar información en el que se exponen las medidas que se quieren tomar, qué modificaciones habrá y cuáles serán las condiciones. Este periodo dura entre 15 días y un mes, aunque en ocasiones puede extenderse. La consigna es exponer los intereses y las preocupaciones de las dos partes e intentar llegar a un acuerdo para que el expediente prospere. En la mayoría de los casos (alrededor de 90%), este objetivo se logra.
  • Si no se llega a un acuerdo en ese plazo, el siguiente paso consiste es levantar un acta que recoja la disconformidad de los trabajadores y presentarla ante la autoridad laboral que corresponda. Pero oponerse a las condiciones que plantea la empresa, redactar este documento e, incluso, presentarlo, no significa que se vaya a detener el proceso. A pesar de todo, el ERE se puede aprobar. Aunque las empresas saben que si no cuentan con el beneplácito de los trabajadores lo tendrán más complicado, si se demuestra la necesidad de un ERE (por pérdidas económicas, entre otras causas), seguirá adelante. En estos casos es casi seguro que las autoridades laborales aprueben el expediente, sobre todo, si la empresa ofreció incentivos a sus trabajadores en la etapa inicial de la negociación. La compañía puede poner a disposición de los empleados lo mínimo exigido por ley o esforzarse por brindar otras compensaciones y mejoras. Lo lógico es se negocie cuando hay oportunidad (al principio), sobre todo, cuando la empresa tiene una causa sólida.
  • Es fundamental adoptar las medidas necesarias a tiempo y negociar en ese momento, puesto que la empresa está obligada a brindar toda la información mercantil y económica a sus trabajadores. No obstante, ante una iniciativa de ERE, conviene consultar con un abogado, que orientará a los empleados afectados, aclarará la situación e indicará las posibilidades desde el punto de vista legal. Una vez que la empresa consigue la aprobación administrativa, las posibilidades de negociación se reducen de modo notable.


¿Quieres luchar contra un ERE?

Te puedes dirigir entonces a alguno de estos sindicatos alternativos:
· CGT (en todo el territorio)
· Solidaridad Obrera (implantado especialmente en Madrid)
· USTEA (en Andalucía)
· LAB (en Euskal Herria)

También puedes dirigirte a CCOO o UGT, pero te cobrarán entre 100 y 400 euros por la asesoría jurídica y se quedarán entre el 10% y el 15% de tu indemnización. Los sindicatos alternativos denuncian esta práctica, que creen que contribuye al alto porcentaje de acuerdos en la negociación de EREs en España.









¿Qué te ha parecido este artículo? ¡Deja tus comentarios!



   

miércoles, 22 de junio de 2011

“Vaya la que están montando esos indignados”

http://www.terceraopinion.net/2011/06/19/los-indignados-esos/

Hace ya unas semanas, casi meses, que llevo oyendo frases como la que encabeza este post. Frases que ven a “los indignados” como algo externo. Como si todo lo que piden no fuera con el resto de la gente. Y es que, y me permito el lujo de generalizar, vivimos una sociedad en el que quejarse es fácil pero mover el culo no tanto.

Hace unos días, un conocido me decía, literalmente: “La que están montando los indignados esos”. Y me lo decía un tipo al que el banco está a punto de quitarle el piso; un tipo cuya mujer está en paro porque la empresa ha aprovechado la coyuntura para echar a las personas mayores de 50 años; un tipo cuyo hijo sigue viviendo de becas porque, en este país, tuvo la mala suerte de elegir el camino de la investigación.

Hace unos días, mientras esperaba en una sala de espera -tengase en cuenta la redundancia- de un hospital, una mujer le decía a otra: “Vaya la que están montando esos indignados”. Lo decía una mujer que llevaba más de 90 minutos esperando a ser atendida y que se quejaba de que igual no tenía dinero para coger el autobús de vuelta.

La semana pasada otro conocido me comentaba: “Y todo eso de la Puerta del Sol, ¿para qué?”. Esto lo decía un tipo que lleva esperando más de un año a que le llegue la ayuda de La Ley de Dependencia a su madre. Un tipo que ignora que ese dinero no llega porque los políticos de turno lo han invertido en obras, y es que de ahí pueden pillar cacho y de lo otro no tanto.

El otro día leía que una empresa de Cieza, AGRONATIVA, ha sido denunciada por obligar a sus empleadas a colgarse una cartulina con un rótulo en el que pone la palabra «aseo» cuando quieren ir al servicio. Además, Agronativa limita a cinco minutos el tiempo que las trabajadoras pueden tardar en ir y volver y advirtió de que algunas de ellas están dejando de beber líquidos para no tener que someterse al control y verse obligadas a llevar el cartel, que tiene «el tamaño de un folio».

Y es que usted, al igual que yo, conocerá a muchísima gente que pasa la vida quejándose: a mi hijo lo han echado del trabajo sin ninguna razón, mis niños llevan tres años yendo a un colegio hecho con barracones, los políticos se llevan todo nuestro dinero, en el hospital me han dado cita para operarme de aquí diez meses…

Y usted, al igual que yo, espero, quizás también se pregunte qué hace toda esa gente en casa. ¿No deberían ser los primeros en estar ahí, en las protestas, en las manifestaciones…? ¿No deberían ser los primeros en reivindicar todos sus derechos, en intentar cambiar esto? ¿No deberían ser los primeros en moverse?

.

P.D.: Lo que ustedes ven en la imagen es una taenia, o también conocida como tenia o solitaria. Las tenias son uno de tantos tipo de parásitos que habitan en nuestro mundo. Es decir, son organismos que viven a costa de otro, castigándole y aprovechándose de todo lo que hace pero sin mover un sólo dedo.



¿Qué te ha parecido este artículo? ¡Deja tus comentarios!

martes, 21 de junio de 2011

El Pacto del Euro. ¡¡¡Pásalo!!!

 Fuente: http://comolosaposciegos.blogspot.com/2011/06/el-pacto-del-euro-pasaselo-tus.html



Y además, si duermes con un pepino envuelto en lija metido en el culo  durante diez noches seguidas, la décima noche verás a Dios y su puta madre.

La deuda de los ricos




Fuente: http://www.vnavarro.org/?p=5712#more-5712

Los ricos son muy pocos en cualquier país, pero tienen un enorme poder. Y un indicador de este poder es lo que está pasando con la deuda pública tanto en EEUU como en la Unión Europea, incluyendo España. Su influencia sobre el Estado de tales países implica que sus impuestos han ido descendiendo durante los últimos 30 años (en España durante los últimos 15) de una manera muy notable, haciéndose cada vez más ricos. Esta gran reducción de ingresos a los estados ha significado que estos han tenido que endeudarse, pidiendo préstamos a los bancos donde los ricos depositan e invierten su dinero. O sea que los ricos, en lugar de pagar al Estado (en impuestos), le prestan el dinero que han ahorrado al evitar pagar impuestos al Estado, el cual les tiene que pagar unos intereses. El sistema es perfecto para los ricos (y para los bancos donde los ricos depositan su dinero), transfiriendo así una gran cantidad de fondos del sector público a los ricos y a sus bancos.

Veamos los datos, comenzando por EEUU. Según Robert Reich, que fue ministro de Trabajo y Asuntos Sociales del Gobierno de Clinton, el tipo máximo de gravamen de los ricos (el 1% de la población con mayor renta) de EEUU era, desde el fin de la Segunda Guerra Mundial, hasta 1980, casi un 70%. O sea, por cada dólar que ingresaba la gente más rica, tenía que pagar 70 centavos al Estado en impuestos. En aquellos tiempos incluso presidentes republicanos como Dwight Eisenhower creían que no era bueno para la sociedad que hubiera desigualdades extremas. Esta creencia respondía a la fuerza que tenían las izquierdas que configuraban la cultura política dominante durante el período 1950-1980. Ni que decir tiene que los ricos intentaban escabullirse de pagar ese 70%. De ahí que, a base de deducciones y otras medidas, este 70% bajaba al 50%. Por otra parte, el impuesto sobre el rendimiento del capital era del 35%.

Todo esto cambió con el presidente Reagan, que inició la revolución reaccionaria neoliberal. Tal presidente bajó los impuestos de los ricos de una manera muy notable (aunque subió los impuestos de todos los demás; en realidad fue el presidente que más subió los impuestos en tiempos de paz en EEUU). Se inició así toda una serie de políticas que han llevado a una situación en la que los ricos pagan ahora sólo un 36% al Estado. Del 50% al 36% durante el periodo 1980-2011. Y los impuestos sobre el rendimiento del capital bajaron del 35% al 15%. Tales ventajas fiscales alcanzaron tal nivel que, en 2010, 18.000 familias ricas no pagaron ningún impuesto. En realidad, las 400 familias más ricas de EEUU han pagado únicamente el 18% de sus ingresos en impuestos al Estado federal. Como consecuencia de estas políticas, el 1% de renta superior que en los años setenta ingresaba el 9% de toda la renta nacional, en 2010, ingresó nada menos que un 20% de la renta nacional.

Tal concentración de las rentas crea un enorme problema económico: la falta de demanda que estimule la economía y cree empleo. Los ricos tienen tanto dinero que, cuando consiguen más dinero, en lugar de aumentar su consumo, lo invierten, a fin de acumular más y más dinero, creando un problema grave. En momentos de recesión, se necesita que la gente consuma para que crezca la demanda. Pero si el 20% de la renta nacional la tiene el 1% de la población que (en términos proporcionales) consume menos, se crea un gran vacío en la demanda.

Y esto es lo que está ocurriendo en EEUU, en la UE y también en España. Es más, como no hay mucha demanda en la llamada economía productiva, donde se producen bienes y servicios (resultado del descenso de las rentas del trabajo como porcentaje de la renta nacional) los ricos no invierten en actividades y áreas productivas sino en actividades más rentables, que son las especulativas, creando las burbujas que nos conducen a los desastres que conocemos. La burbuja inmobiliaria es un ejemplo. Pero, ahora que la burbuja ha explotado, los ricos, a través de los bancos, compran deuda pública, es decir, bonos del Estado. Y, a través de las agencias evaluadoras de los bonos, como Moody’s, Standard & Poors y otros (que son instrumentos de la banca), crean una percepción de alto riesgo, a fin de que los estados tengan que pagarles elevados intereses.

Los bancos españoles poseen el 52% de la deuda española. Reciben préstamos de dinero del Banco Central Europeo a intereses muy bajos (1%), y con este dinero compran bonos públicos del Estado español que les dan una rentabilidad de un 6%. Es difícil diseñar un sistema que sea más favorable para los ricos y para sus bancos. Y mientras se hacen superricos, piden a la ciudadanía que se apriete el cinturón bajo la excusa de que “no hay alternativa”. Y los mayores medios le dicen a la población que la “presión de los mercados financieros” (la frase más utilizada en la cultura dominante del país) obliga al Estado español a seguir políticas públicas enormemente impopulares, presentándolas como necesarias e inevitables. Pero esta presión, en el caso español, deriva primordialmente de los bancos y de los ricos españoles, que causaron la crisis (sus especulaciones en el mercado inmobiliarios), y ahora se están beneficiando de tales políticas, exigiendo dinero al Estado (con intereses elevados de los bonos) para prestarles su dinero, el mismo dinero que consiguieron pagando menos impuestos.

Es obvio que hay alternativas. De este análisis se deduce que la mejor manera de evitar el endeudamiento del Estado no es bajando el gasto público (muy bajo en el caso español), sino subiendo los impuestos de los ricos y superricos a los niveles del periodo anterior (y en el caso español a niveles homologables a los países nórdicos). Un trabajador de la manufactura paga ya el 78% de lo que paga su homólogo en Suecia. Un rico (el 1% de renta superior) paga en impuestos un 20% de lo que paga su homólogo en Suecia. Y así nos va.

Vicenç Navarro


¿Qué te ha parecido este artículo? ¡Deja tus comentarios!